Si queréis leer la entrevista completa a cada una de nosotras sólo tenéis que darle AQUÍ. La entrada es preciosa y merece la pena que os paséis.
Yo voy a dejaros aquí en mi blog mis respuestas a las preguntas, así me conocéis un poquito más.
1. ¿Cómo te enteraste de
que estabas embarazada? ¿Con quién estabas? ¿Cómo reaccionaste?
Estaba tomándome la píldora anticonceptiva por lo que me
bajaba la regla muy regular. Cuando tenía que venirme no vino, entonces esperé
unos días…Podía retrasarse por cualquier cosa. Al ver que seguía sin bajarme
pensaba que era un descontrol o algo así, jamás pensé que podía estar
embarazada. Le dije a mi madre que tenía un retraso y ella me dijo que me
hiciera un test para descartar…
Al día siguiente me levanté de madrugada sola y me hice el
test, cuando mi madre se levantó se lo enseñé y así nos enteramos que estaba
embarazada.Al ver el positivo lloré mucho, me lo tomé muy mal…No podía creer que eso me estuviera pasando a mí, no lo asimilaba.
Nunca dudé a la hora de seguir adelante con mi embarazo.
Siempre supe que quería tenerla.
Tuve muchísimo miedo de todo: del qué dirán, de cómo sería
pasar por un embarazo, de qué diría mi padre y mi novio, de qué haría con los
estudios, de los cambios físicos…
Tuve una mezcla de sentimientos. Por un lado miedo,
tristeza, angustia…porque un embarazo no buscado a nuestra edad no es fácil.
Pero por otro lado me sentía ilusionada, feliz y contenta por saber que dentro
de mí estaba mi hija. En esos momentos era todo muy confuso.
Fui al médico a recoger los análisis de sangre dónde se
confirmase mi embarazo, pero dieron negativo. Habían pasado más de 10 días
desde que me los hice, yo seguía sin regla y aunque varios test de orina me
habían dado positivo pero el de sangre me decía que no estaba embarazada.
Me mandaron a urgencias a hacerme una ecografía, querían
saber si estaba embarazada o había algún problema. En el taxi camino del
hospital no podía parar de llorar…tenía mucho miedo de que le pasara a mi hijo
algo malo. Llamé a mi novio y nos vimos allí Tras mucho esperar me hicieron un test de orina que dio positivo, así que me pasaron a hacerme la ecografía. Nunca olvidaré ese momento. El médico miraba la pantalla y no me decía nada, al cabo de los minutos me dice “Lorena, ¿ves ese punto que parpadea? Es el corazón de tu hijo. Estás embarazada”. Sólo media unos milímetros, estaba de 6 semanas y algo, pero fue increíble lo que me hizo sentir.
Las comidas prohibidas: boquerones en vinagre, conchas
finas, jamón serrano, salchichón…
Estaba de muy poco tiempo, no llegaba a las 5 semanas.
Por quien más apoyada me he sentido ha sido por mi novio y
las familias de los dos en general.
Quien menos me apoyó fueron mis amistades de entonces. En
momentos así entiendes quienes están ahí de verdad y quién no.
Sí. Mi mejor amiga desde la infancia no estuvo a mi lado y
luego me hizo sentir bastante mal. Pero bueno, siempre nos falla alguien cuando
pasan estas cosas.
Nunca me han llegado a rechazar directamente ni a insultarme
cara a cara, pero si hubo miradas en los pasillos del instituto, comentarios…
No, casi nunca me han afectado. Siempre me ha importado lo
que pensase la gente de mi alrededor que de verdad me conocía. Ha habido veces
que me han afectado ciertos comentarios, porque no soy de piedra, pero luego me
daba cuenta que no merecía la pena estar mal por algo así.
Me ha hecho madurar mucho más, dejar de mirar solo por mí
para centrarme en una persona que me necesita desde el primer momento y me ha
ayudado a motivarme en mis estudios para conseguir mi meta cuanto antes.
Tenía que dejar de fumar, de hecho lo hice. También tuve que
dejar de ser egoísta y descuidada para ciertos temas y centrarme en ella.
Al día siguiente de salir de cuentas notaba contracciones.
Aunque no eran muy regulares decidí ir a urgencias. Allí tras examinarme y ver
que las contracciones no paraban decidieron ingresarme. Estuve 2 días en el
hospital con contracciones irregulares, iba dilatando poco a poco… pero no
estaba de parto. El martes de madrugada me despertó un fuerte dolor en la tripa
y tras ver si se me pasaba y pasearme por la habitación decidí despertar a mi
madre y a mi novio que estaban durmiendo. Llamaron a la enfermera y me bajaron
a sala de dilatación para explorarme. Aquello ya empezaba a doler muchísimo y
puse en práctica las respiraciones que aprendí en clases preparto. Ya estaba
dilatada de 6 cm y decidí ponerme la epidural.
No me hizo efecto, las contracciones las seguía notando muy
fuertes y aunque me subieron la dosis varias veces aquellos seguía igual… Por
fin, tras casi 8 horas, estaba dilatada completamente. Me llevaron a paritorio
a prepararme mientras mi novio se preparaba para entrar conmigo. Tras 15
minutos empujando nació mi hija. Era muy grande y tenía su manita en la cara,
parecía que nos saludaba.Mientras terminaban conmigo me la pusieron en el pecho y tras oír mi voz dejó de llorar y giró la cabeza hacia mí, intentando abrir los ojos. Tras un rato lo consiguió y allí estaba, mirándome. Mi novio y yo no nos pudimos contener las lágrimas, era lo mejor que habíamos hecho jamás.
Sí, desde el primer momento ha estado apoyándome y haciéndose
cargo de nuestra hija.
Cuando le dije que estaba embarazada se lo tomó bastante
bien. Fue una sorpresa para él, pero en todo momento dijo que me apoyaría en la
decisión que tomase y así ha sido.
Me he sentido más vulnerable porque mi carácter cambió
muchísimo durante el embarazo. Estaba más sensible de lo normal, tenía miedo,
felicidad, nervios… Todo era desconocido.
Mi madre fue la primera en enterarse, después que yo… Se lo
tomó realmente mal. Quería que abortara, pensaba que iba a dejar mis estudios y
todo se iba a ir al traste.
A mi padre se lo dije cuando estaba de 8 semanas. Fue el
peor momento de todos…recuerdo que me senté al lado de él, en el sofá y le dije
“Estoy embarazada”. No dijo nada, me miró y se quedó callado. No sabía qué
pensaba, le dije que me dijera algo, que no se callara…Y me abrazó. Yo me puse
a llorar y me preguntó qué es lo que quería hacer. Me dijo que me apoyaría pero
como condición me puso que no dejase mis estudios.A mi familia se lo dijo mi padre. Cuando estaba casi de 12 semanas mi tía llamó a mi casa diciendo que se había quedado embarazada. Su sorpresa fue grande cuando mi padre le dijo que yo también estaba embarazada. Ellos me apoyaron también.
Ahora todos adoran a mi hija.
Mi mejor amiga desde siempre. Parecía que me apoyaba pero no
era así.
Sentía que estaba en una nube, no me creía que por fin tenía
a mi hija conmigo. Que pudiera tocarla, besarla, abrazarla… Estaba muy feliz.
No, por suerte tuve un embarazo y un parto genial.
No, siempre hemos estado sanas.
Ahora mismo estoy acabando la carrera de Derecho en la
universidad, me quedan un par de años. Luego quiero hacer el máster de abogacía
y dedicarme a ello.
Se llama Judith.
Antes de quedarme embarazada oímos ese nombre en una serie
de televisión. Nos gustó mucho a mi novio y a mí ya que dónde yo vivo casi
nadie se llama así. Cuando me quedé embarazada y supimos que era una niña
estuvimos mirando otros nombres por si alguno nos gustaba más, pero nos
decantamos por el primero de todos.
Antes no tenía horarios para nada, ahora tengo que respetar
los horarios de mi hija.
Antes salía de mi casa cuando quería, ahora no puedo hacer
eso.Antes miraba por mí y luego por el resto de las personas, ahora miro primero por mi hija.
Antes podía comportarme como quisiera, ahora debo dar ejemplo a mi hija y conseguir que tenga un buen referente de mi.
Antes no sabía lo mucho que se podía querer a un hijo, ni entendía a mi madre. Ahora entiendo muchas cosas y sé lo que es el amor verdadero.
No estoy a favor de que la gente aborte utilizándolo como
método anticonceptivo. Pero si hay algún fallo y esa mujer no puede/no quiere
ser madre, siempre que lo haga dentro de las primeras semanas, no veo mal que
tome esa decisión. No podemos obligar a nadie a ser madre.
No estoy de acuerdo con esa ley. Nos restringe mucho más
nuestros derechos, nos obliga a tener hijos con graves enfermedades incluso.
Lo viví muy feliz e ilusionada, aunque las últimas semanas
se hacen eternas. Es una etapa maravillosa por la que volvería a pasar otra vez
sin dudarlo.
Ahora la entiendo mucho más, sé porqué se ponía a veces tan
pesada y lo que le dolía verme mal.
Si me arrepiento, pero es normal haber actuado así…Hasta que
no se es madre no entendemos a las nuestras propias.Y por el contrario, ¿crees que las madres adolescentes somos un ejemplo a seguir?
Un mal ejemplo es alguien que asesina, secuestra, roba…Pero
unas mujeres que lo dan todo por sus hijos, no son un mal ejemplo.
Sí y no. Sí somos un ejemplo a seguir porque demostramos que
con esfuerzo y lucha todo se consigue. Pero no deben seguir nuestro ejemplo. Antes de tener hijos hay que estudiar, buscar una estabilidad...Con un hijo se puede hacer muchas cosas, pero todo cuesta el doble. Por eso es mejor vivir cada cosa a su tiempo.
Lo mejor es tu hijo, completo. Ver como aprende cosas
gracias a ti, sus besos, sus risas, verlo crecer feliz y contento y sentirte
realizada porque es así por ti.
Lo peor es que pierdes muchas cosas que hacen las chicas de
tu edad, los estudios cuestan mucho más y los comentarios de algunas personas.
Nadie tiene derecho a juzgarnos solo por la edad en la que
hemos decidido ser madres. No somos perfectas y cometemos errores, pero como
madres de 30 años. Por el simple hecho de ser madres jóvenes no debemos
avergonzarnos de nada. Somos un ejemplo de lucha porque a pesar de nuestra edad
criamos a nuestros hijos con todo el amor y el cariño posible transmitiéndole
los mismos valores que madres más adultas.
Ellos son felices, nosotras lo somos, y la opinión de los
demás no importa.
No, no me arrepiento. Hoy día no me imagino mi vida sin mi
hija. No sé cómo he podido vivir 18 años sin conocerla.
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