domingo, 4 de mayo de 2014

Decepciones.

Es ley de vida, a todos en más de una ocasión nos han fallado. Hemos hecho todo por esa persona y cuando menos nos lo esperábamos nos da una puñalada trapera y nos sentimos idiotas, imbéciles, ridículos por dar tanto y recibir tan poco. 
Mi vida no es demasiado larga, solo tengo 22 años y se que aún me quedan muchas cosas por vivir y por aprender. También se que hay personas que en menos años lo han pasado mucho peor que yo, puedo sentirme realmente afortunada porque mi vida en general no ha estado nada mal. Pero a cada uno le duelen sus experiencias ¿no? 

Siempre he sido una persona muy confiada, creía todo lo que me decían, me dejaba conquistar con cuatro palabras bonitas y ya tenían mi amistad ganada. Así, sin más, sin necesidad de que me demostrasen nada. 
En varias entradas os conté las veces que me he sentido traicionada (aquí y aquí), ha habido más momentos pero menos importantes que aquel.

Sé que os dije que no iba a hablar de ella, que no se merecía un hueco en mi blog, que era darle demasiado protagonismo...Pero siento que tengo una espina clavada, necesito desahogarme, y ¿con quién mejor que con vosotros? Con los que día a día me leéis, los que me apoyáis.

Emma. ¿Qué decir de ella? Formaba parte de Mi Comité, ella fue la que tuvo la genial idea de unirnos a todas y la que hizo que hoy día estemos tan unidas como ahora. Un día mientras leía el ask de Lydia, sin tener yo aún ni cuenta, vi que le hablaban de una chica nueva que iba a ser mamá. Empecé a leerla y aunque al principio me parecía muy reservada y antipática fui conociéndola más. Al cabo de los días decidí crearme una cuenta, quería tener un trato más cercano con esas mamis que estaban pasando por lo mismo que yo ya pasé. Recuerdo que a una de las primeras que empecé a seguir fue a ella. Con el tiempo nos intercambiamos los teléfonos, hablábamos casi a diario por WhatsApp, nos reíamos... Un día a ella se le ocurrió la idea de unirnos a Lydia, Paola, Ainhoa, Jessica, ella y yo en un mismo grupo de WhatsApp para que pudiéramos hablar juntas. A todas nos pareció genial y así se creó el Comité.
Durante aproximadamente 5 meses compartimos a diario risas, confidencias, fotos de nuestros hijos, secretos, lágrimas...Nos contábamos todo, hasta la más mínima tontería, pero un día todo se desmoronó. Descubrimos que ni Emma se llamaba así, ni era madre, ni nada de lo que nos habíamos contado durante todos esos meses era verdad. Todo era mentira.

Algunos me entenderéis, a otros os parecerá ridículo y pensaréis que exagero, pero ese día me sentí más traicionada que nunca. Primero entré en shock, no podía creerlo, y luego no podía parar de llorar...Es muy duro enterarte que tu amiga (bueno, a la que tú considerabas amiga) no es quien has pensado que era desde que la conoces. Que ella sabe todo de ti y tu nada de ella, que has escuchado y has consolado a una persona que todo lo que te contaba era mentira. Sus problemas, esos que ella me contaba para desahogarse, no han existido nunca. Su vida era puro teatro. Por si eso no fuera poco con el tiempo descubrimos que llevaba años inventándose embarazos, hijos y vidas. Nosotras solo fuimos un pasatiempo más, una de sus invenciones para llenar el tiempo. 

Tuve una mezcla de sentimientos enormes. Por un lado rabia por todas sus mentiras, pena por ella, tristeza por esa Emma que jamás existió y al final solo me queda la compasión... Porque odiar a alguien es darle más importancia de la que se merece y por mucho que me cueste admitirlo no puedo odiar a una persona que ha sido tan importante para mí. En un futuro, si ella consigue recuperarse, estaré dispuesta a escucharla. Nada volverá a ser como antes, eso es lógico, por mucho que me duela se que es imposible...Pero a día de hoy hay momentos en los que aún miro mi móvil y espero ver algún mensaje suyo o una nota de voz de esas que me hacían reír.

Como siempre digo todo tiene su lado bueno, por muy escondido que esté. Gracias a ella nosotras, el verdadero Comité, estamos más unidos que nunca. Nuestras Pecadoras también. Ahora somos una piña, nos ha servido para unirnos más y apoyarnos entre nosotras. 
El día que pasó todo me dí cuenta de la cantidad de gente maravillosa que tengo alrededor y no puedo acabar esta entrada sin agradecéroslo.

GRACIAS. Gracias a todos los que me escuchasteis, a los que me entendisteis, a los os preocupasteis de mí. Soy muy afortunada por estar rodeada de gente tan maravillosa. Valéis oro, nunca os podré agradecer el apoyo que tuve ese día. 
En especial quiero nombrar a Miriam, Laura, Noelia, Carmen y mis Rocio's. De verdad que sois geniales...No sois conscientes de lo que ese día hicisteis por mi. Os quiero muchísimo Ninfómanas mías.

Nunca dejéis que nadie os quite la sonrisa. Por muy mal que lo paséis, por mucho daño que os hagan, siempre id con una sonrisa en la cara porque todo se supera. Mi sonrisa siempre irá conmigo, nadie me la ha quitado ni me la quitará jamás.

"Sólo nos damos cuenta de la traición y de la amistad cuando ambas se cruzan... Allí podemos distinguirlas y compararlas, sentirlas y despreciarlas. El corazón no siente si los ojos no ven; pues, mis ojos ya vieron."





2 comentarios: